Dicen que el gobierno de Rajoy “pasa” del tema catalán. Se equivocan. Soraya Sáenz de Santamaría, que se encargará del tema catalán, es una mujer con decisión y cogerá el toro por los cuernos, es decir querrá llegar a acuerdos con el gobierno catalán, con el sentido común (seny), por una parte, y el cumplimiento de la ley por otra. Si no lo hace, es mejor que no empiece.
Otros entuertos que se dicen por ahí, en tierras catalanas: la decisión de que el Tribunal Constitucional tenga facultad para aplicar las sentencias que de él derivan, rompe la división de poderes. El TC no forma parte del Poder Judicial y su ámbito se reduce a interpretar la Constitución, como en tantos otros países.
El Poder Judicial lo componen los jueces ordinarios y los magistrados que forman parte de las salas de los tribunales territoriales (audiencias provinciales y tribunales superiores de justicia de ámbito autonómico), la Audiencia Nacional cuando supera los ámbitos anteriores citados y el Tribunal Supremo, que es el máximo órgano jurisdiccional español, como establece la Constitución (art. 123).
Los órganos policiales actúan como cuerpos dependientes del gobierno mientras su actuación no dependa de los jueces, los cuales disponen de policías (policía judicial) que solo deben obedecer a los jueces y no al gobierno. Otra cosa sería mezclar los poderes judicial y ejecutivo.
De eso poco saben muchos independentistas, que han acusado al gobierno de la Generalitat de enviar policías para detener a la alcaldesa de Berga, Montse Venturós, de la CUP. La detención fue por desacato a la justicia, pues no se presentó ante el juez las dos veces en que fue requerida. No fue detenida por poner una "estelada" en el balcón del ayuntamiento el día de las elecciones, desoyendo la orden de la Junta Electoral, sino por burlarse del juez y de la justicia después de citarla el juez en dos ocasiones y jactarse de no haber ido.
La detención fue esmeradísima por parte de la policía catalana: solo le faltó poner alfombra roja. Ni siquiera subieron al domicilio y solo usó la policía el interfono "dando el tiempo que quisieron a la alcaldesa. Pero, claro, la CUP, grupo antisistema y anarcoide, no podía dejarlo pasar sin estridencias e improperios.
En el País Vasco pasaba y pasa lo mismo. Cuando detienen al jefe de la ETA --el otro día en Francia-- salen los de Bildu y otros radicales, como Arnaldo Otegui, y dicen que "el Estado español no busca la paz", sino la guerra. Es el mismo Otegui que fue recibido con todos los honores de gran dirigente político por el Parlamento catalán. Los mismos perros con distintos collares.
Ya se sabe que para los independentistas la desobediencia es ley. Sin embargo, para los jueces la ley es la ley y deben hacerla cumplir. Por eso vamos a ver que esa desobediencia a la ley va a tener consecuencias para quienes han hecho caso omiso de la misma.
La detención fue esmeradísima por parte de la policía catalana: solo le faltó poner alfombra roja. Ni siquiera subieron al domicilio y solo usó la policía el interfono "dando el tiempo que quisieron a la alcaldesa. Pero, claro, la CUP, grupo antisistema y anarcoide, no podía dejarlo pasar sin estridencias.
En el País Vasco pasaba y pasa lo mismo. Cuando detienen al jefe de la ETA --el otro día en Francia-- salen los de Bildu y otros radicales, como Arnaldo Otegui, y dice que "el Estado español no busca la paz", sino la guerra. Es el mismo Otegui que fue recibido con todos los honores de gran dirigente político por el Parlamento catalán. Los mismos perros con distintos collares. Los vscos ladran más, pero ya nadie les tiene miedo si el Estado les aplica la ley.
La detención fue esmeradísima por parte de la policía catalana: solo le faltó poner alfombra roja. Ni siquiera subieron al domicilio y solo usó la policía el interfono "dando el tiempo que quisieron a la alcaldesa. Pero, claro, la CUP, grupo antisistema y anarcoide, no podía dejarlo pasar sin estridencias e improperios.
En el País Vasco pasaba y pasa lo mismo. Cuando detienen al jefe de la ETA --el otro día en Francia-- salen los de Bildu y otros radicales, como Arnaldo Otegui, y dicen que "el Estado español no busca la paz", sino la guerra. Es el mismo Otegui que fue recibido con todos los honores de gran dirigente político por el Parlamento catalán. Los mismos perros con distintos collares.
Ya se sabe que para los independentistas la desobediencia es ley. Sin embargo, para los jueces la ley es la ley y deben hacerla cumplir. Por eso vamos a ver que esa desobediencia a la ley va a tener consecuencias para quienes han hecho caso omiso de la misma.
La detención fue esmeradísima por parte de la policía catalana: solo le faltó poner alfombra roja. Ni siquiera subieron al domicilio y solo usó la policía el interfono "dando el tiempo que quisieron a la alcaldesa. Pero, claro, la CUP, grupo antisistema y anarcoide, no podía dejarlo pasar sin estridencias.
En el País Vasco pasaba y pasa lo mismo. Cuando detienen al jefe de la ETA --el otro día en Francia-- salen los de Bildu y otros radicales, como Arnaldo Otegui, y dice que "el Estado español no busca la paz", sino la guerra. Es el mismo Otegui que fue recibido con todos los honores de gran dirigente político por el Parlamento catalán. Los mismos perros con distintos collares. Los vscos ladran más, pero ya nadie les tiene miedo si el Estado les aplica la ley.
Comentarios
Publicar un comentario