A medida que se camina hacia la consulta del domingo en Catalunya la cuerda está cada vez más tensa. La votación no creo que se pueda parar. El president Artur Mas ha jugado su “plan B” de modo que personalmente no se va a implicar, aunque su gobierno ya se ha expuesto mucho pidiendo la apertura de las escuelas como colegios electorales y la participación “voluntaria” de los funcionarios. Los partidos soberanistas quieren hacer un pulso a Rajoy y hablar de “participación masiva” en la consulta-bis. Sería “masiva” para los partidos pro-consulta si participa más de un 50 por ciento de los mayores de 16 años. Como no hay censo y y es difícil controlar quién vota y quién no, ni cuántas veces ha votado “fulanito” --solo se necesita el DNI—no es difícil sumar papeletas. Habrá tras la consulta del domingo guerra de cifras. Los aparatos de propaganda oficiales y oficiosos (los medios de comuni...
Reflexiones sobre la actualidad (Artículos del autor publicados en la prensa)