Jordi Pujol i Soley ha decepcionado a muchos, muchísimos catalanes, que a pesar de los problemas que parte de su familia tiene con hacienda y la justicia, siempre se había considerado al patriarca de los Pujol, a quien gobernó Catalunya durante 23 años, fuera de sospecha, y como un referente de honradez política, como un modelo de ética profesional frente a tanta corrupción entre la clase política. Pujol ha defraudado no a hacienda, sino a los catalanes de buena voluntad que le seguían y creían que él era un referente del buen hacer política y de las prácticas morales. Siempre dijo que es un católico, pero durante 30 años ha estado estafando al fisco de manera continuada y sin que “encontrara tiempo” de regularizar su situación. Ha sido un golpe duro sobre todo para los militantes de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC). Nad...
Reflexiones sobre la actualidad (Artículos del autor publicados en la prensa)