La ordenación episcopal de una mujer anglicana ha puesto de nuevo en el candelero la crisis de la Comunión Anglicana, que ha empujado a la Iglesia católica a acoger a los anglicanos que, aun manteniendo los ritos propios, quieren pertenecer en la Iglesia católica. A tal fin el papa Benedicto XVI creó en 2009 los llamados “ordinariatos personales” (Constitución Apostólica Angliconarum coetibus) que acogen a sacerdotes y fieles procedentes del anglicanismo y que no quieren continuar en esta comunión a causa de lo que creen son desviaciones fundamentales de la doctrina, como la ordenar mujeres al sacerdocio. Hasta ahora se han creado tres ordinariatos, equivalentes a obispados, que tienen la especificidad de que los sacerdotes (un centenar en total) que proceden de la comunión anglicana mantienen sus ritos propios y por eso se difere...
Reflexiones sobre la actualidad (Artículos del autor publicados en la prensa)