La falta de “flexibilidad” es un punto central que discrimina a la mujer-madre (o esperando serlo) en el trabajo y hace muy difícil la conciliación familia-trabajo. Así lo asegura Nuria Chinchilla profesora del IESE (Instituto de Estudios Superiores de Empresa, de la Universidad de Navarra), especializada en conciliación entre trabajo y familia, en unas declaraciones en exclusiva para Aleteia. Esta falta de flexibilidad se observa tanto a nivel de empresa como a nivel de sector público y sindical. “O las empresas se organizan de cara a la familia o acabamos con la sociedad. Pues si no hay familia, no hay hijos, y si no hay hijos no hay recambio generacional y la sociedad muere”, afirma Nuria Chinchilla. El pasado día 15 de mayo, Día Internacional de la Familia, el Foro de la Familia y The Family Watch han coincidido en solicitar "un apoyo real" a la familia y medidas para superar el "parón demográfico". Dice la profesora Chinchilla: “Hay que repensar l...
Reflexiones sobre la actualidad (Artículos del autor publicados en la prensa)