Ir al contenido principal

La complejidad de la familia ante el próximo Sínodo de Obispos de 2015 (y 2)

Cuando una pareja lleva muchos años viviendo juntos y se hace casi imposible reconstruir el matrimonio inicial. ¿Qué hacer? El matrimonio lo han debilitado las leyes permisivas como el divorcio cada vez más laxo, y no pocos cristianos tienen una vida familiar irregular.

El Sínodo de 2014 pide para ellos mucha comprensión y acompañamiento y es más: como dijo el mismo papa Francisco, muchos matrimonios rotos y muchos divorcios lo son porque el matrimonio inicial era nulo, pero no han llevado el caso a los tribunales de la Iglesia. ¿Cuántos divorcios son la consecuencia de matrimonios nulos? El papa Francisco ha decidido la gratuidad en las causas matrimoniales.


En el caso de los divorciados y vueltos a casar hay circunstancias que conviene cuidar adecuadamente y se dan muchas situaciones injustas. También hay que cuidar pastoralmente: la preparación del matrimonio en la que los futuros esposos conozcan bien a lo que se van a obligar, a que no confundan un sentimiento pasajero con el amor profundo que se requiere al contraer matrimonio. Que no confundan el enamoramiento con el amor. En este terreno también los sacerdotes y los agentes de pastoral tienen el deber de tener una excelente preparación para poder transmitir al matrimonio la auténtica doctrina del amor de Jesucristo a su Iglesia, que es una donación total e indisoluble.


La fórmula del sacramento dice: “Yo, Luis, te  recibo a ti, Ana, como esposo,
y prometo serte fiel
tanto en la prosperidad como en la adversidad,
en la salud como en la enfermedad,
amándote y respetándote durante toda mi vida”. (Rito de la celebración del Sacramento del Matrimonio).

Como dice el Cantar de los Cantares: “Mi amado es mío y yo soy suya… Yo soy de mi amado y él es mío” (Ct 2, 17; 6, 3). La fórmula es muy potente porque es muy exigente en ese amor que ha nacido entre los nuevos esposos análogo al amor indisoluble de Jesús con la Iglesia, con la que tiene una alianza esponsal (la Iglesia es la Esposa de Cristo) como afirma San Pablo en doctrina inequívoca (Cfr. Ef, 5).

Decía el documento final del Sínodo de 2014: “Ante todo, está el desafío de la fidelidad en el amor conyugal. La vida familiar suele estar marcada por el debilitamiento de la fe y de los valores, el individualismo, el empobrecimiento de las relaciones, el stress de una ansiedad que descuida la reflexión serena. Se asiste así a no pocas crisis matrimoniales, que se afrontan de un modo superficial y sin la valentía de la paciencia, del diálogo sincero, del perdón recíproco, de la reconciliación y también del sacrificio”.

Por lo tanto, para perseverar en este amor entre los esposos desde el primer día, en la familia es imprescindible vivir la lealtad, la confianza, la transparencia, la fidelidad, la fortaleza, la justicia que consiste en esforzarse en comprender al otro para no tomar decisiones injustas, la templanza, el buen humor, el saber ceder, el perdón y la eliminación de todo resentimiento o venganza. En el matrimonio no hay nada que sea “imperdonable”, porque el amor entre esposos y entre padres e hijos, participa del amor de Dios a los hombres y es un amor infinito

Descendiendo a casos concretos, citamos el ejemplo de un obispo africano que el pasado Sínodo puso sobre la mesa el caso de un hombre polígamo que quiere convertirse al catolicismo. Solo podrá tener una mujer, pero ¿qué será de las otras cuatro que gozaban de un nivel de vida y un “status” social determinado? No podrán ser repudiadas y abandonadas a su suerte, sino que requerirán de una solución justa y equitativa.  


Otra cuestión que ha sido ya abordada por el papa Francisco: los tribunales para la nulidad de los matrimonios deben ser más profesionales, más expeditivos, menos burocratizados y más ecuánimes. Son los llamados tribunales de la Rota a los que hay que quitar mucho polvo y promocionar a profesionales del derecho, hombres y mujeres, no eclesiásticos para que ocupen cargos dentro de los mismos.  Ahí se podrían citar los matrimonios mixtos entre un cónyuge católico con otro que no lo es. Los no católicos no quieren saber nada de tribunales eclesiásticos y de anulaciones matrimoniales.  ¿Cómo resolverlo?                                                                                                                  
                                                                                                       
Y un asunto importante ¿cómo se acompaña a las mujeres embarazadas –a veces adolescentes—para que no caigan en la depresión, el dolor y la angustia y decidan abortar? El papa Francisco ha dicho que la Iglesia debe proteger a los débiles “con predilección” y entre ellos tanto las futuras madres que se encuentran solas  como“los niños por nacer, que son los más indefensos e inocentes de todos a quienes hoy se les quiere negar la dignidad humana en orden a hacer de ellos lo que se quiera”, cuando el “ser humano es siempre sagrado e inviolable en cualquier situación y en cada etapa de su desarrollo” (Evangelii Gaudium, n. 213). Y añade el papa: “toda violación de la dignidad personal del ser humano grita venganza delante de Dios” (Ídem). Lo mismo vale para la eutanasia en personas mayores.

Sería largo hacer un elenco más amplio de situaciones familiares  que necesitan una atención pastoral urgente y delicada.




Comentarios

entradas populares

Gaudí no era un soltrerón ni un masón

El escritor e ingeniero Josep Maria Tarragona i Clarasó (Barcelona, 1957), es un gran divulgador de la vida y obra del genial arquitecto y artista, Antoni (Anton le llamaban sus familiares y amigos) Gaudí i Cornet. Muchos escritos de JM Tarragona están en la web www.antonigaudí.org , y ahora acaba de publicar su segunda biografía de Gaudí: “ Gaudí, el arquitecto de la Sagrada Familia ”, en español, catalán e inglés. Se preparan las ediciones en alemán, francés e italiano. En la presentación del libro –que tuvo lugar en la Cripta de la Sagrada Familia—el libro fue calificado de “definitivo”, aun tratándose de una “biografía breve”. Lo entrevistamos en una salita de su despacho, especial para el Diari de Tarragona -SA.- Gaudí, ¿de Reus o de Riudoms? -JMT.- Gaudí nació legalmente en Reus. Así consta en la partida de bautismo (no había Registro Civil entonces), en su cartilla militar y en los documentos y actas notariales que le mencionan. Sin embargo, existe una tradición

El uniforme en el colegio ¿sí o no?

Ejemplar la actuación  del fundador de Facebook, Mark Zuckerberg,  quien siempre lleva la misma ropa. El uniforme para ir al colegio, en los niveles obligatorios, levanta polémicas todos los años. ¿Sí o no al uniforme? Veamos qué dicen los partidarios y los detractores. Los detractores del  uniforme dicen que este señala a los niños y niñas de clase social alta. Además, el uniforme es desechado sobre todo por las niñas, que lo aborrecen muy pronto porque ellas quieren ser “distintas”, y dejar de ser “colegialas”. Así mismo -dicen los detractores- tanto chicos como chicas ven el uniforme como una cosa  antigua , de antes, no lo quieren. Los padres también piensan lo mismo: el uniforme va contra la formación de la personalidad de cada niño o niña, cuando se debe fomentar que cada alumno/a destaque por sí mismo/a. El uniforme, como su nombre indica,  uniformiza  cuando hoy cada vez más se tiende a individualizar. Los padres y educadores que  son partida

¿Por qué hay que prohibir los piropos?

                (Aleteia) Un piropo es una galantería, un cumplido, un halago, una lisonja que va dirigido a una mujer para exaltar su persona, su belleza . ¿A qué mujer no le gusta que se le diga que está muy guapa? Lo que ocurre es que la mujer está siendo peor valorada en la sociedad actual y solo es contemplada por una buena parte de los hombres como objeto de deseo . ¿Tendrá que ver con ello la ideología de género? Ese ya es otro tema. No confundir los piropos, con las expresiones groseras, bastas, soeces, bajas, en definitiva maleducadas, molestas y desagradables, que hieren la intimidad de la mujer . Prohibir o “erradicar” los piropos me parece una solemne tontería, cuando estos son galantes, delicados e ingeniosos. Sí que podrían rechazarse socialmente (no penalmente) las expresiones desagradables que ofenden a la mujer, como apunta Ángeles Carmona, presidenta del Observatorio de la Violencia Doméstica y de Género español, dependiente del Consejo General del Poder Judi