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Elecciones europeas: gana el Partido Popular, pero se rompe el plácido bipartidismo


En las elecciones europeas han sufrido pérdidas de votos y escaños los dos principales partidos (el Partido Popular y el Partido Socialdemócrata) por lo que han perdido la mayoría absoluta por vez primera en la Unión Europea y deberán gobernar con el apoyo de un tercer partido que será o el Partido Liberal o Los Verdes, que han resultado ganadores.
La temida subida de los partidos nacionalistas, euroescépticos y populistas, casi todos apoyados por Moscú y Pekín, no han tenido la temida subida que rompiera la estabilidad de la UE, pues solo han alcanzado el 22 por 100 de los diputados, aunque con buen resultado en Francia, Gran Bretaña e Italia.

Las elecciones al Parlamento Europeo las ha ganado el Partido Popular Europeo que ha obtenido 180 escaños (221 en la anterior legislatura) de los 751 escaños , seguido del Partido Socialdemócrata con 145 escaños (frente a 191), el Partido Liberal con 107 (tuvo 67) y los Verdes con 70 (tuvo 50 hace cinco años. Los partidos euroescépticos, nacionalistas y contrarios a la Europa actual suman 170 escaños (155 en la pasada legislatura), lo que representa un 22 por 100 de la cámara europea.

La caída más fuerte ha corrido a cargo del Partido Socialdemócrata, especialmente en Alemania (en España ha ganado), y frente a ello han subido muy fuertemente los liberales y los verdes. La Unión Europea, por lo tanto, sigue viva, y la causa ha sido el “bréxit”, la posible salida de la Gran Bretaña que ha hecho aumentar el número de votantes o participación en las elecciones en prácticamente todos los países, ante las complicaciones que puede generar.

El problema que se va a presentar, dado que la mayoría va a ser de tres partidos, es quién presidirá la Comisión (ejecutivo), el Consejo y el Parlamento. Hasta ahora eran cargos que se repartían el Partido Popular Europeo y el Partido Socialdemócrata. Ahora deberá tener el beneplácito del Parlamento lo que supondrá una negociación nada fácil. En Europa, sin embargo, hay una gran dosis de paciencia y conocimiento en el arte del pacto.

A destacar en las elecciones europeas la victoria del partido de ultraderecha francés de Marine Le Pen, por encima del partido de Emmanuel Macron, el presidente. En Italia, la fuerte victoria del ultranacionalista Matteo Salvini, y en Gran Bretaña la del Partido del Bréxit, liderado por el antieuropeo Nigel Farage. En Gran Bretaña el Partido Conservador, de la dimitida Theresa May, ha quedado quinto con el 9 por 100 de los votos. Otro partido contrario a la UE ha sido el del líder húngaro, Viktor Orban, que ha sacadlo mayoría absoluta y en Polonia ha ganado también la ultraderecha.

Sin embargo, en el resto de los países, de los 28 que conforman la Unión Europea, los partidos euroescépticos han tenido poca importancia, y lo importante es que en Alemania han ganado los Cristiano Demócratas y no ha aumentado la extrema derecha. En Austria ha retrocedido la extrema derecha y en España los independentistas catalanes han sacado solo cuatro eurodiputados, de los que tres difícilmente podrán ejercer porque, o están en la cárcel, como Oriol Junqueras de Esquerra Republicana, o están huidos de la justicia en Bélgica, como Carles Puigdemont o Antoni Comín.

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